En el Estadio Único de La Plata, luego de empatar 0 a 0 en los 90, el “xeneixe” eliminó al “millonario” del certamen, tras imponerse 4 a 1 en la definición por penales. Agustín Rossi tapó el primer remate, de Julián Álvarez, clave para encaminar la serie a su favor, ya que después, Braian Romero falló el segundo disparo; mientras que Boca fue contundente y no erró ningún penal.
Foto Nicolas Kovacs
Este enfrentamiento, fue el primero en la historia de la Copa Argentina, contó con las ausencias de Matías Suarez en River, y Sebastián Villa en Boca; mientras que el peruano Luis Advincula hizo su debut absoluto en el elenco de Miguel Russo.
Un duelo a todo o nada, que comenzó con Boca con la mayor intensidad, sus líneas adelantadas, exponiendo a sus centrales a jugar mano a mano, con aproximaciones al área sin generar peligro alguno.
River, por su parte, pudo anteponerse a los primeros minutos de repliegue defensivo, pero entró en ese juego friccionado propuesto por su rival, además, la rapidez de un campo de juego mojado sumó imprecisiones para ambos equipos, incomodos para agarrar la pelota y asociarse, buscando esa segunda jugada que expone el error del contrario… en fin, un partido muy peleado, de poco futbol, más disputado que jugado.
Asimismo, River desperdició una chance clarísima, en la que Julián Álvarez asistió a Braian Romero, quien, debajo del arco, no pudo empujar la pelota a la red por un mínimo desvío en el arquero Agustín Rossi, que desconcertó al delantero ex Defensa y Justicia.
A través de Juan Ramírez, flamante incorporación del equipo de Russo, el conjunto de La Boca intentó organizar ataques desde el medio campo, pero este jugador fue derribado en varias oportunidades, generó faltas, y amonestaciones (las de Enzo Pérez, Paulo Díaz y Gonzalo Montiel), como también lo fue una escapada de Cristian Pavón, que casi queda mano a mano con Franco Armani, de no ser por un corte providencial de Héctor Martínez, quien también vio la tarjeta amarilla.
Foto Nicolas Kovacs
En los segundos 45 minutos, el encuentro siguió siendo friccionado, y se inclinó a favor del equipo de Nuñez, quien tomó la iniciativa y demostró algo de la asentada forma de jugar que tiene el equipo de Marcelo Gallardo.
En un remate de Brian Romero, el “Cali” Iquierdoz se jugó la vida para salvar su arco, y luego Agustin Rossi tapó el rebote que le quedó a Bruno Zuculini. También tuvo aproximaciones al gol desde media distancia, pero los disparos de Briaian Romero y Nicolas de La Cruz salieron desviados.
El marcador parecía poder abrirse, pero Boca entorpeció el juego, con foules y amonestaciones, como las de Carlos Zambrano y Marcos Rojo, quien caminó sobre la cornisa en una patada a Julián Álvarez en la que el árbitro Patricio Loustau podría haberlo expulsado.
La entrega del “xeneize” fue efectiva, ya que pudo ponerle paños fríos a la situación en la que se vio superado en el inicio del segundo tiempo. Los cambios le dieron aire al equipo, aunque el rumbo del partido no cambió, ya estaba destinado a la definición desde los doce pasos.
Foto Nicolas Kovacs
River pudo haber marcado la diferencia pero le faltó eficacia, ante un Boca que fue al frente pero generó poco peligro. Ya todos conocemos la historia los penales: son cincuenta y cincuenta, lo ganan los que mejor se sobreponen a la presión. Aquí el héroe fue Agustín Rossi, quien le tapó a Julián Álvarez el primer remate desde los doce pasos; y luego Braian Romero le erró al arco, quedando la historia favor de los de Miguel Russo: Marcos Rojo, Juan Ramírez, Cristian Pavón y Carlos Izquierdoz no fallaron en sus remates, accediendo así a la siguiente instancia en la que deberán enfrentar a Patronato en los cuartos de final de la Copa Argentina.
Formaciones:
Boca: Agustín Rossi; Luis Advíncula, Carlos Zambrano, Carlos Izquierdoz, Marcos Rojo, Agustín Sandez; Diego González, Esteban Rolón, Juan Ramírez; Cristian Pavón y Norberto Briasco. DT: Miguel Russo.
River: Franco Armani; Gonzalo Montiel, Paulo Díaz, Héctor Martínez, Fabrizio Angileri; Bruno Zuculini, Enzo Pérez, José Paradela; Nicolás De la Cruz, Braian Romero y Julián Álvarez. DT: Marcelo Gallardo.
Árbitro: Patricio Loustau
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