Talleres no pudo superar a la Lepra mendocina en el Kempes y deja pasar una chance inmejorable para llegar a los cuartos de final. Castro y Bou los goles del 1-1. En la última fecha viajará al Libertadores de America para visitar al Rojo.
El Matador tomó el control del juego desde el arranque y sin ser tan preciso le marcó la cancha a la Lepra en un partido que está prácticamente obligado a ganar si quiere pelear por un lugar entre los mejores 4. Nahuel Bustos y la pantera Bou se mostraron como las cartas más desequilibrantes que presenta en la ofensiva el albiazul. Promediando la primera etapa Talleres lo siguió buscando con más ímpetu que fútbol. Blas Riveros y Luis Sequeira en el tándem izquierdo trataron de llevar lo más peligroso al arco rival.
Antes de los 30 y para sorpresa de todos, salida en falso de Kevin Mantilla que aprovechó Tonetto para servirle el gol a Castro que remató solito y solo. Baldazo de agua helada en el Kempes, la Lepra sin hacer prácticamente nada lo pasaba a ganar por la mínima y le dejaba la dura misión a la ¨T¨de recuperarse lo antes posible. Las tribunas del estadio también sintieron el malestar y se empezaron a impacientar con el equipo que hasta el momento parecía golpeado por el gol y no le encontraba la vuelta al partido.
Talleres llegó al empate. Cuando los nervios de todo el equipo dominaban la escena, Walter Bou decide rematar desde afuera del área, la pelota pega en el pecho del uno mendocino y se le mete junto al palo para el desahogo de su gente.
Antes del final del primer tiempo tuvieron una clarita por lado. Primero Independiente no pudo definirlo casi en el área chica y Talleres salió disparado de contra, Galarza decidió mal y desperdició una clarísima. La última fue de Bou que remató por arriba. El primer tiempo se iba con un local al que jugó mal defensivamente y una Lepra que por como se fue dando el cotejo, parecía conformarse.
El complemento arrancó con una tónica similar al primer tiempo. Talleres con la intención de buscarlo pero con pocas ideas en ofensiva. Independiente sin tener la pelota se las ingeniaba para manejarle el partido mientras ganaba alguna pelota parada y jugaba lejos del arco de Monllor.
Pasados los 30 minutos Ribonetto apostó por cambios y mando a la cancha a Ortegoza, Benavidez y Girotti para torcer la historia de cara al final.. Sin dudas que en el último cuarto de hora el conjunto Matador, que no encontró la vuelta en todo el partido, lo fue a buscar con el empuje de la gente y alguna individualidad que lo salvara pero nada fue suficiente y terminó desperdiciando una chance inmejorable. En la última fecha deberá visitar al Rojo en Avellaneda.
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