Fin de la fase regular para Atenas e Instituto: la Gloria volvió a sonreír en el clásico y sigue en carrera rumbo al título; el Griego también festejó.
En una noche con todos los condimentos, principalmente un Polideportivo Carlos Cerutti colmado, Instituto derrotó a Atenas por 95 a 84 en una nueva edición del clásico del básquet cordobés y no solo le bajó la persiana a la fase regular con un triunfo ante el Griego, sino que además finalizó el torneo en el 3º lugar, desplazando a Peñarol y evitando en cuartos a un rival a priori más complicado que si hubiese finalizado 4º.
El máximo anotador del equipo dirigido por Lucas Victoriano fue el pívot santafesino Tayavek Galizzi, autor de 20 puntos y 9 rebotes. Por el lado del Verde, que si bien perdió en casa y se quedó afuera de la lucha por el título festejó ante su gente el haber mantenido la categoría por al menos una temporada más, fue Omar Cantón (15 puntos y 5 rebotes), uno de los más aplaudidos de la noche por los hinchas del Griego.
El Polideportivo Carlos Cerutti lució repleto como en sus mejores épocas, cuyas tribunas se tiñeron de fiesta por los globos y cánticos de ambas hinchadas, que convivieron pacíficamente en las tribunas. Pero fueron tantos los hinchas del Verde y la Gloria que asistieron al Cerutti que muchos otros debieron regresar a sus casas sin poder ingresar por la capacidad colmada.
El triunfo albirrojo le permite ahora a la Gloria (25-13) enfocarse en lo que serán los cuartos de final, instancia en la que enfrentará a un rival surgido de la reclasificación, de la que Atenas quedó a las puertas (clasificaban del 5º al 12º y terminó en el 13º puesto). A partir de cómo cerró la fase regular, los cruces quedaron definidos de la siguiente manera: Boca (5º) vs. San Lorenzo (12º), Regatas (6º) vs. Riachuelo (11º), San Martín (7º) vs. Olímpico (10º) y Oberá (8º) vs. Ferro (9º).
Los otros tres equipos que ya tienen abrochada su presencia en cuartos son Quimsa (1º), Gimnasia de Comodoro Rivadavia (2º) y Peñarol (4º). Ninguno aún tiene rival definido, pero un hipotético cruce que podría darse en semifinales sería Instituto-Quimsa, al mejor de cinco juegos.
Por el lado de Atenas, la derrota en el derbi a manos de Instituto le puso punto final a otra difícil temporada en la que se conjugaron múltiples adversidades (la salida del DT Saborido tras nueve partidos, refuerzos que no estuvieron a la altura, “cortes” y demás) pero que afortunadamente tuvo final feliz dado que tras el triunfazo del pasado jueves en La Rioja frente a Riachuelo logró mantener su lugar en la elite del básquet argentino, que ya vio al Griego gritar campeón nacional en nueve oportunidades.
Para dar cuenta del repunte del Verde en la recta final, de la mano de la dupla Claudio Arrigoni-Bruno Lábaque, ganó cinco de los últimos siete partidos, claves para mantener la categoría y evitar jugar la reválida. Así, Atenas cerró la sufrida fase regular con 15 triunfos y 23 derrotas, consciente de que si bien cumplió el objetivo de mínima que era mantener la categoría, deberá hacer una fuerte autocrítica para evitar volver a cruzar toda una Liga calculadora en mano y empezar a pensar en alto, fiel a su historia.
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