Boca no se despeino y lo definió fácilmente ante Vélez. Victoria clara con goles de Pavón y Cardona, de penal, en la etapa inicial del encuentro, y de Villa sobre el final.
Informe Departamento de Prensa de Boca Juniors.
Vélez amagó con hacerse protagonista del partido en la Bombonera, pero no pasó de amagues. Y cuando el Xeneize pisó el acelerador liquidó la historia. Primero fue un buen pase de Wanchope para Pavón, que avanzó en soledad y liquidó a Domínguez con un fuerte remate. Luego, falta sobre Tevez en el área y penal, que Cardona canjeó por gol pateando con extrema categoría. El 2-0 olía a decisivo y así fue. Es cierto que el equipo de Heinze intentó acercarse sobre el arco de Andrada en la segunda etapa, pero lejos estuvo de traerle serio riesgo al Xeneize. Boca lo sostuvo tranquilo, Guillermo rotó el banco para dosificar esfuerzos en plena triple competencia, y la frutilla del postre llegó sobre el final. Villa quedó mano a mano con el arquero velezano, y anotó con remate alto sobre la humanidad del ecuatoriano Domínguez.
Sólido y goleador. Así fue Boca en la noche del domingo ante Vélez. Los de Heinze no pasaron de los amagues, mientras que el Xeneize custodió bien su arco y fue mortal en el de enfrente. Con siete puntos en cuatro fechas, el equipo de Guillermo refresca sus ilusiones de pelear en lo más alto de la tabla de la Superliga, y vuelve a cambiar el chip. Ahora, el eje será la Copa Argentina ya que el viernes desde las 18 se medirá ante San Martín de Tucumán en Formosa por los 16vos de final de la competencia integradora. Boca sustenta sus sueños a fuerza de goles y va por todo en los tres torneos.
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